Menos es más

Nos vamos acercando a final de año, y ya podemos constatar un hecho, y es que el gasto realizado por los turistas que escogen la península como destino vacacional ha aumentado respecto al año anterior. Eso sí, no podemos olvidar tampoco, que el número de pernoctaciones ha sido inferior al año anterior. 

Según fuentes de la Encuesta de Ocupación Hotelera del INE, Octubre es el quinto mes consecutivo de descensos en las pernoctaciones, donde el turismo nacional ha ayudado a aliviar esa caída ya que estas han aumentado respecto al año anterior. Por otro lado, los precios se mantienen estables, registrando ligeros aumentos en la facturación media por habitación, sin embargo, el RevPar descendió ligeramente. 

Esta semana tuvo lugar la cuarta edición del Summit Shopping en Madrid, donde directivos del sector defendieron que se debe de apostar por la diferenciación como forma de atraer turistas de mayor gasto. 

En nuestro anterior post, defendíamos el papel que debía tomar el colectivo hotelero hacía las nuevas amenazas creadas por la era digital, innovando y aportando diferenciación en las marcas para fidelizar y captar nuevos clientes. Pues bien, mi amigo Amancio López, presidente de Hotusa Group, predicaba que una de las amenazas del colectivo es la homogeneización. “Si tenemos las mismas tiendas y las mismas cadenas de restaurantes en todos los destinos, se pierde la autenticidad”. De este modo, desde su punto de vista, es esencial la búsqueda de la identidad y la singularidad para atraer a turistas con más capacidad de gasto. Por otro lado, y que preocupa, lo comentado en relación a que “el foco del turismo debe estar en el incremento del gasto y no en el volumen de turistas”. 

No es una sorpresa pues, que las próximas campañas y promociones del colectivo irán encaminadas a captar al turista con cartera “boyante”, asumiendo claramente que el número de turistas será menor que en pasadas temporadas. Por lo que teniendo en cuenta la capacidad hotelera de la ciudad de Barcelona, y la tendencia en el sector, parece claro que empezará una batalla encarnizada en ocupar habitaciones. El precio será una vez más, el “gancho” más recurrido para atrapar clientes. 

Por último, también se debatió “la necesidad de diseñar un plan estratégico bien definido en promoción turística, que dedique una mayor cuantía y que una al Gobierno central y las comunidades en un proyecto común, en especial para dar a conocer nuestra oferta en destinos de largo radio. 

Perdonad mi atrevimiento, pero este último llamamiento me suena a “llorera”… Todos estos años el colectivo hotelero ha vivido una época de abundancia donde no ha parado de incrementar beneficios, aumentado activos, creado puestos de trabajo, y riqueza en general en su entorno. Ahora, no creo que esté de más, que esta vez sea el colectivo que devuelva esa energía hacia otro lado ¿no?, es el karma dicen, da mucho y algún día se te verá recompensado…, bueno… como fábula ha estado bien…



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